Vía-Crucis-Vía lucis
Comentarios de las Estaciones del Ejercicio Piadoso
por
Francisco Javier Olivares Chao,
Vicario Parroquial de
Santa María de Baiona.
Precioso cuadro del Vía-Crucis
¿Conoces las indulgencias otorgadas
al Ejercicio piadoso del Vía-Crucis?
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Las Indulgencias del Vía-Crucis
Regulaciones actuales sobre las indulgencias
Publicadas en el Enchiridion Indulgentiarum
Normae et Concessiones,
Mayo de 1986, Librería Editrice Vaticana
(Traducción no oficial del inglés
por el Padre Jordi Rivero)
Se concede indulgencia plenaria a los fieles cristianos
que devotamente hacen las Estaciones de la Cruz.
El ejercicio devoto de las Estaciones de la Cruz
ayuda a renovar nuestro recuerdo de los sufrimientos de Cristo
en su camino desde el praetorium de Pilato,
donde fue condenado a muerte, hasta el Monte Calvario,
donde por nuestra salvación murió en la cruz.
Las normas para obtener estas indulgencias plenarias son:
1. Deben hacerse ante Estaciones de la Cruz erigidas según la ley.
2. Deben haber catorce cruces. Para ayudar en la devoción
estas cruces están normalmente adjuntas
a catorce imágenes o tablas representand
o las estaciones de Jerusalén.
3. Las Estaciones consisten en catorce piadosas lecturas
con oraciones vocales. Pero para hacer estos ejercicios
solo se requiere que se medite devotamente
la pasión y muerte del Señor.
No se requiere la meditación de cada misterio de las estaciones.
4. El movimiento de una Estación a la otra.
Si no es posible a todos los presente hacer este movimiento
sin causar desorden al hacerse las Estaciones públicamente,
es suficiente que la persona que lo dirige
se mueva de Estación a Estación mientras los otros
permanecen en su lugar.
5. Las personas que están legítimamente impedidas
de satisfacer los requisitos anteriormente indicados,
pueden obtener indulgencias si al menos pasan algún tiempo,
por ejemplo, quince minutos en la lectura devota
y la meditación de la Pasión y muerte de nuestro Señor Jesucristo.
6. Otros ejercicios de devoción son equivalentes
a las Estaciones de la Cruz, aun en cuanto a indulgencias,
si éstos nos recuerdan la Pasión y muerte del Señor
y están aprobados por una autoridad competente. .
7. Para otros ritos. Los patriarcas pueden establecer
otros ejercicios devotos en memoria
de la Pasión y muerte de nuestro Señor,
en manera similar a las Estaciones de la Cruz.
¿Conoces las Estaciones del Vía-Crucis?
¿Conoces la Vía Dolorosa, la Calle de la Amargura?
Comentarios a las Estaciones
del Vía-Crucis, Vía-lucis
por
D. Francisco Javier Olivares Chao,
que confecciona este Blog Parroquial
de Santa María de Baiona.
Al final de esta presentación de las Imágenes
con unas pequeñas consideraciones,
te pondré unos enlaces, para que puedas variar
y te salgas de la rutina.
La consideración de las Estaciones del Vía-Crucis,
y no podemos dejar de aprovechar
en este tiempo de Cuaresma,
para acompañar a Jesús por la Vía del Dolor,
que además te ayudará a comprender,
el esfuerzo sobrehumano del Señor por ti,
el SACRIFICIO del HOMBRE DIOS por ti,
que se entregó hasta la muerte...
y una muerte de CRUZ!!!
Jesús es condenado a muerte.
No fueron los judíos el pueblo "deicida".
Lo dejó bien claro Benedicto XVI.
La política anduvo por medio.
Los políticos de hoy le volverían a crucificar...
y tu y yo también, que nos nos decidimos
El flojo de Poncio Pilato,
que fue una marioneta en mano de aquellos agitadores,
Hizo lo mismo que han hecho los políticos de hoy,
con los argumentos que fuesen,
de los agitadores modernos y del gran negocio
de las clínicas abortistas,
los que le condenan a muerte
ya en el seno materno.
¡Cuántos niños, que no van a nacer,
porque se les ha sentenciado a muerte!
¡Seguimos condenando a muerte a Jesús,
y nuestros votos también influyeron!.
Después de ver la película de la
Pasión de Cristo,
vemos con más claridad y nos admiramos
de cómo fue capaz el Señor de soportar
el camino de la Vía Dolorosa.
Dicen los santos...que fue para ayudarte
a llevar la cruz de cada día.
Llévala con dignidad, con garbo y con alegría,
no solo con resignación
o porque no haya más remedio,
porque El va a tu lado siempre.
Jesús cae por primera vez
Si se ponen a consideración tres caídas,
quiere decir que el Señor,
puede señalar en cada una
a un grupo concreto de personas.
El primero, somos todos los cristianos
y todos los hombres de todos los tiempos,
que caemos con frecuencia y necesitamos
un ejemplo de firmeza, para levantarnos,
pedir perdón y volver a comenzar y recomenzar.
La vía dolorosa dura muchas veces,
lo que dura nuestra vida.
que las risas no llegan para los lloros!.
Que los lloros sean, más bien, por nuestros pecados.
Le llevan a su Hijo, para "ajusticiarlo"
¿Así llevamos a la práctica el
"Haced lo que El os diga"?
la Historia de nuestra Salvación,
fue el único bálsamo de consuelo
hasta consumar su sacrificio en el calvario,
la entrega por nosotros... por ti y por mí.
Ayuda tu ahora a María, y pégate bien a Ella.
Simón el Cireneo le ayuda
¿Te has enterado de que dice el Evangelio,
de que el cireneo era el padre
de Alejandro y de Rufo,
dos de los primeros cristianos?
Así premia, con esa generosidad,
que lleva a la salvación,
lo que hizo el cireneo forzado:
el ayudar a Jesús a llevar la cruz.
La cruz se puede llevar de muchas maneras.
Pues aunque a veces nos parezca
que la llevamos forzados,
el Señor no se deja ganar en generosidad.
Mas por las veces que no la quisimos llevar...
a la hora de dar la cara por Jesús.
No tengas miedo a dar la cara por Él.
¿Sabes cuál es el premio?
Llevar en nuestra vida bien impresa,
la figura de Jesús, en nuestros pensamientos,
en nuestras obras, sin miedo al qué dirán.
Por las veces que no hemos dado la cara por Jesús...
Jesús cae por segunda vez.
Te decía en la tercera estación,
que las tres caídas tenían un significado,
Por lo menos a mí me parece.
Tu puedes pensar otra cosa, pero...
Con una era suficiente!, pero dos...y tres...!!!
Entonces piensa en las caídas de tantos cristianos,
con votos, promesas y compromisos,
puedes saberlo por experiencia,
la tentación y la debilidad les hizo caer...
Por esa segunda caída, levántate siempre,
porque Él siempre te ayudará a levantarte.
Él se levantó una vez más para enseñarte,
que no está todo perdido.
Que puedes comenzar y recomenzar,
cuenta contigo y conmigo.
Señor, pequé...
*****
Octava Estación
Jesús consuela a las
mujeres de Jerusalén.
Las mujeres casi siempre son las primeras
en compadecerse del que sufre,
las primeras en estar allí.
Luego las veremos al pié de la Cruz.
Pero aquí el Señor les recuerda su vida
y la de sus hijos, porque Él, el Inocente,
va a morir por nuestros pecados,
los pecados de todos/as,
aunque no lo compadezcamos.
Llorad también por vuestros pecados y
por los pecados de vuestros hijos.
Los hijos de muchas lágrimas, no pueden perderse,
como no se perderá Agustín de Hipona.
Pero ahora, muchas madres,
se han olvidado de sus hijos que viven mal,
que proyectan su vida sin Dios,
que ellas mismas, algunas,
habrán matado la vida de sus hijos
en sus entrañas.
¿No crees que, por todo eso,
porque no lloramos,
porque nos acostumbramos
a ver cómo se ofende a Dios
y pasamos o vivimos indiferentes...?
Tenemos que decir con mucho dolor...
Señor, pequé!!!...
*****
Novena Estación
Jesús cae por tercera vez.
Es la caída más dolorosa de Jesús.
Se le acabaron las fuerzas físicas.
Su amor por nosotros no ha decaído,
y por eso continuará y no se morirá
en este momento,
donde tú y yo, probablemente,
habríamos acabado.
Por eso nos quiere dar la gran lección
a los Ungidos por el Sacramento del Orden.
Son nuestros pecados,
los de los que teníamos que ser otros Cristos,
porque actuamos "in persona Christi",
los que le hemos hecho caer por tercera vez.
¿Es que te duele recordar los pecados
de los sacerdotes,
que han escandalizado y mancillado
a los niños? ¡¡¡Recuérdalo!!!
Y están en nuestra memoria reciente.
¿Es que no le van a hacer caer los pecados
de aquellos sacerdotes,
que puedan haber celebrado,
lo más sagrado, en pecado mortal?
¿Es que no le van a hacer caer los pecados
de los que van a desobedecer gravemente
al Magisterio de la Iglesia,
convirtiéndose ellos en
"intérpretes infalibles" de la sagrada Escritura,
apartando del camino a tantos,
porque no dieron ejemplo de fidelidad?
¿Y qué podemos decir, de los que
abandonaron el camino,
porque no fueron fieles...?
Por todo eso...
Señor, pequé...
*****
Décima Estación
Jesús es despojado
de sus vestidos.
¿Has pensado alguna vez, en las razones de
esta escena afrentosísima
en el camino de la Cruz?
Dolor físico intenso.
¡Cuánto duele una herida, cuando te levantan
el apósito de una llaga!.
¿Cómo estaría el cuerpo ensangrentado,
y llagado, después de la flagelación
y de su carne en llaga viva
por el peso de la Cruz?
Eso no es nada
comparado con la vergüenza
de verse desnudo ante la mirada
de aquellos ojos desvergonzados
de aquellos que se mofan de Él.
Los que han perdido el pudor y la modestia,
y no viven la santa pureza,
no lo entenderán nunca.
Les falta la sensibilidad en su piel.
No tienen alergia a los desvergonzantes desvestidos
de tantas y de tantos!!!
Pureza...!!! y se sonríen...¿ lo recuerdas?...
Por todo eso...
Señor, ten piedad...
*****
Undécima Estación
Jesús es clavado en la Cruz.
Se dejó clavar en la cruz, como cordero
llevado al matadero. Sin quejarse.
Tres o cuatro clavos le traspasaron
las manos y los pies.
¡¡Dolor sobre dolor!!
Y tú y yo nos quejamos por
el más pequeño pinchazo.
Más todavía le han dolido al Señor
los martillazos de nuestros pecados, no lo olvides.
Por eso y muchas cosas más...
que las tendrás presente en este momento,
si tienes un poquito de amor a Jesús...
que lo tienes!!! no lo dudes!,
porque si no, no aguantarías estas reflexiones...
Señor, pequé...
*****
Duodécima Estación
Jesús muere en la Cruz
Va a dar lo que le queda.
Unas palabras de testamento final,
y después nos va a dar en usufructo a su Madre,
para que cuide de nosotros durante la vida,
y la encontremos con los brazos abiertos al final,
junto a los brazos de Jesús.
Pero para eso, tenemos que pedir perdón,
como el buen ladrón, muchas veces.
Él ya lo ha hecho, con el...
"Padre, perdónalos, porque no saben l0 que se hacen"
Tendremos que saciar la sed del Señor,
llevándole muchas almas al Sacramento del perdón.
Tendremos que acudir a Él muchas veces,
para decirle que lo necesitamos, aunque nos parezca
que estamos abandonados y solos
con nuestros problemas gordos.
Tendremos que estar dispuestos a entregar nuestra vida,
y llevar plenamente cumplido
el plan de Dios para con nosotros,
nuestra vocación,
y cuando llegue el momento, hacer como El.
"Et inclinato cápite, trádidit spiritus"
Inclinando la cabeza...aceptando todo,
sin rebelarse contra la voluntad del Padre,
haciendo realidad sus palabras
de auténtica entrega, como en su oración
en el Huerto delos Olivos,
" No se haga mi Voluntad sino la Tuya"...
entregó su espíritu en manos del Padre
por tus pecados y por los míos.
Por todo eso...
Señor, pequé...
****
Décimatercera Estación
Jesús es bajado de la Cruz.
En muchos lugares, se le llama
la "Señora de las Angustias",
O "La Piedad".
Nadie le quiso tanto como su Madre, Nuestra Madre.
Nadie sufrió tanto como Ella. Es como si nos diese a luz
en medio de tantos dolores.
Ahora la tenemos que acompañar, no dejarla sola.
Porque Jesús así lo quiso, podemos llamarle:
¡Madre! ¡Madre!
¡Que no te dejemos sola!
Tendrás que cogernos en tu regazo,
en tu colo, muchas veces,
como lo hiciste con tu Hijo.
Solo así nos sentiremos protegidos
como los niños pequeños.
Que no quiera ser grande,
junto a la Cruz de tu Divino Hijo.
Y porque muchas veces pretendí salir de tu regazo...
Señor, pequé...
*****
Decimacuarta Estación
Sepultan el cuerpo de Jesús
La Virgen María se ha quedado sola.
Tú y yo vamos a hacerle compañía,
esperando que se cumpla la profecía.
"Al tercer día resucitaré",
porque Ella no lo dudó, aunque sufrió lo indecible
con la muerte de su Hijo,
ahora nuestro Hermano mayor.
Y le pusieron una guardia,
para impedir de los discípulos,
según decían los que le ajusticiaron,
cualquier estratagema,
que se hiciese peor después,
si llegaban a decir, escondido el cuerpo,
que había resucitado.
Pero los discípulos estaban escondidos,
y llenos de miedo, por si iban a por ellos.
Solo Juan y con reservas,
porque estaba cerca de Santa María...
Aguardaba con Ella, el que se cumpliese...
Por las dudas de tantos...
Señor, pequé.
*****
Decimoquinta Estación
Jesús resucitó al tercer día
de entre los muertos.
¡¡¡Aleluya, Aleluya, Aleluya!!!
Nosotros, tenemos que morir al pecado
para resucitar a la vida de la gracia,
pasaporte "Sine qua non"
para entrar en la
GLORIA DEL CIELO.
*****
Lo dedico con todo cariño a los lectores el Blog,
para que haciendo el Vía-Crucis,
mejoren su vida cristiana,
y no tengan nunca miedo
a sufrir con Cristo,
para Reinar con Cristo para siempre.
Amén.
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