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Sean bienvenidos

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Invitación y bienvenida

Hola amig@s, bienvenid@s a este lugar, "Seguir la Senda.Ventana abierta", un blog que da comienzo e inicia su andadura el 6 de Diciembre de 2010, y con el que sólo busco compartir con ustedes algo de mi inventiva, artículos que tengo recogidos desde hace años, y también todo aquello bonito e instructivo que encuentro en Google o que llega a mí desde la red, y sin ánimo de lucro.

Si alguno de ustedes comprueba que es suyo y quiere que diga su procedencia, o por el contrario quiere que sea retirado de inmediato, por favor, comuníquenmelo y lo haré en seguida y sin demora.

Doy las gracias a tod@s mis amig@s blogueros que me visitan desde todas partes del mundo y de los cuales siempre aprendo algo nuevo. ¡¡¡Gracias de todo corazón y Bienvenid@s !!!!

Si lo desean, bajo la cabecera de "Seguir la Senda", se encuentran unos títulos que pulsando o haciendo clic sobre cada uno de ellos pueden acceder directamente a la sección que les interese. De igual manera, haciendo lo mismo en cada una de las imágenes de la línea vertical al lado izquierdo del blog a partir de "Ventana abierta", pasando por todos, hasta "Galería de imágenes", les conduce también al objetivo escogido.

Espero que todos los artículos que publique en mi blog -y también el de ustedes si así lo desean- les sirva de ayuda, y si les apetece comenten qué les parece...

Mi ventana y mi puerta siempre estarán abiertas para tod@s aquell@s que quieran visitarme. Dios les bendiga continuamente y en gran manera.

Aquí les recibo a ustedes como se merecen, alrededor de la mesa y junto a esta agradable meriendita virtual.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.
No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad. Les saluda atentamente: Mª Ángeles Grueso (Angelita)

lunes, 30 de enero de 2012

Cuaresma 2012.

"Ventana abierta"

Cuaresma 2012.


Para el Boletín de mi Hermandad de los Dolores de Torreblanca.

Al comienzo de esta Cuaresma y teniendo presente el ejemplo de Jesús, hemos de preguntarnos si de hecho pensamos y vivimos bajo el impulso del Espíritu de Dios.
Alguien ha escrito lo siguiente sobre la manera como, a veces, vivimos:
*"Andamos tan deprisa porque no sabemos adónde queremos ir.
* Compramos tantas cosas porque en realidad no deseamos nada con un deseo profundo.
* Comemos tanto porque no tenemos hambre.
* Reímos tanto y tan fuerte porque no somos felices.
Muchas de estas actividades no son más que la máscara hueca de nuestra insatisfacción".
Con estas palabras, podríamos definir que son la máscara de nuestra falta de Espíritu.

Queridos amigos, si nos retrotraemos en el tiempo, podemos recordar las ofrendas de los Magos a Jesús: oro, incienso y mirra, y éstas nos revelan con claridad meridiana la personalidad de Aquel.
Aquellos sabios, aquellos escrutadores de las estrellas, le entregan su monedita.
En los pueblos antiguos daban un tributo a la muerte, había que entregar la moneda a cada muerto para que pudiesen, teóricamente, pagar un tributo al que tenía que pasarle los abismos en los ámbitos procelosos -llenos de borrascas o tormentas- de aquellos mares, para la vida eterna.
Aquella moneda de oro es el reconocimiento del tributo al Gran Rey, Jesús.
El oro hace referencia al poder, a la realeza.
"¡Él tiene todo poder. A Él toda gloria!".

El incienso hace referencia a la Divinidad.
Él es el Sacerdote de Dios, el que se va a entregar en oblación, como se quema el incienso, como olor agradable a Dios.
Él es la presencia de la Divinidad en la realidad de nuestra carne.

 Entregar mirra, es el elemento propio de las sepulturas, que habla de la humanidad como tal, de reconocerle como Redentor del hombre. Él ha asumido nuestra humanidad.
"¡Cómo un Niño puede contener tanta fuerza!".
Y por eso los Magos, caen de rodillas y lo adoran.

Decir Pascuas en castellano, añadiendo esa 's' a la palabra Pascua, se entiende todo un sentido teológico, porque Dios ha pasado en medio de su pueblo, llevándonos a nosotros, trasladándonos de las tinieblas a la luz; eso es el misterio pascual. Y ese misterio pascual se realiza en cada uno de nosotros y en todos los hombres de buena voluntad, que quieren acoger a Cristo como Rey y como Señor.
Pero es que este Rey no gusta de palacios ni oropeles, sin embargo, los potentes de la tierra están llamados a postrarse ante Él.
"Se postrarán ante Él todos los reyes. A Él le pagarán tributo".
Porque en definitiva este es un Rey que gobierna con cetro de hierro. Un Reino que no acabará jamás. Un Reino de Paz.

La imposición de las cenizas nos recuerda que nuestra vida en la tierra es pasajera y que nuestra vida definitiva se encuentra en el Cielo.
"El comienzo de los cuarenta días de penitencia, se caracteriza por el gesto de la imposición de la ceniza que tiene el sentido de reconocer la propia fragilidad y mortalidad, que necesita ser redimida por la misericordia de Dios.
Lejos de ser un gesto puramente exterior, la Iglesia lo ha conservado como signo de la actitud del corazón penitente que cada bautizado estamos llamados a asumir en el itinerario cuaresmal, captando el significado interior que tiene este gesto, que abre a la conversión y al esfuerzo de la renovación pascual.
Ojalá no quede sólo en recibir la ceniza, sino que desde el principio, la mirada esté puesta en vivir la Pascua y participar de la Vigilia pascual".

El Señor nos introduce en el misterio de la Pascua, y la Pascua temporal de este año, será el 8 de Abril; y nos habla de una Pascua eterna, porque Él ha asumido la realidad de nuestra carne, es reconocible en la carne, para que esta carne concebida en pecado, esta carne pecadora, alcance la redención.
Nosotros, simples mortales, hemos sido convertidos en un pueblo de sacerdotes, profetas y reyes, y reconocemos que sólo a Él hay que pagarle tributo.

Nosotros nos encontramos ante la gran pista, la Palabra de Dios, la que es guía para nosotros.
* Su Palabra proclamada en la Iglesia.
* Custodiada en la Iglesia.
* Celebrada en la Iglesia.
* Predicada en la Iglesia y por la Iglesia, para el mundo.
¡La Palabra de Dios es Luz que guía a los hombres!

 Oración por todas las Hermandades, para que encuentren en Ti su verdadero Guía:
* Por aquellos que no creen en el amor.
* Por aquellos que se olvidan de tu Madre.
* Por aquellos que llorando ven tu pasar silencioso sobre su corazón.
* Por aquellos a los que se les ilumina el alma con la candelería de un paso de palio.
* Por aquellos que en el anonimato, hacen que Tú salgas a bendecir el barrio de Torreblanca.
*Por Torreblanca, Señor, que tiembla y llora, que se estremece y acongoja en tu agonía; y ríe y se alegra en tu Resurrección temprana.
* Por Torreblanca, Señor, que se abre como la flor al contacto del sol mañanero, para que en su corazón inmenso guarde el tesoro de su fe cofrade.
* Por Torreblanca, Señor, que está dispuesta a pasearte en la tarde del Sábado de Pasión, esperando que el martillo dé la primera llamada, con el fervor instalado en su corazón.

En esta Cuaresma, de este año precioso, vamos a aprovechar en la profundización de la fe, reflexionaremos sobre ella y después cuando nos haya penetrado hasta lo más profundo de nuestro ser y la hayamos puesto en práctica, entonces estaremos preparados para difundirla a nuestros hermanos.

El Señor nos ha dado en la Virgen María el modelo de quien escucha su Palabra y la pone en práctica.
Queremos pedir en este tiempo de Cuaresma que nos abra el corazón al gozo de la escucha y que por medio de su Santo Espíritu, haga que se cumpla ya en nosotros su Palabra de salvación.


Un abrazo cercano.
Vuestra hermana en el Señor:
Mª Ángeles (Angelita)

domingo, 29 de enero de 2012

REFLEXIÓN DOMINGO IV DEL TIEMPO ORDINARIO. 29 - Enero - 2012

"Ventana abierta"


REFLEXIÓN DOMINGO IV DEL TIEMPO ORDINARIO

29 - Enero - 2012
GRUPOPARROQUIALBENASQUE
Padre Nacho


A mis queridos amigos y amigas del Grupo Parroquial Benasque, quiero enviarles a través de la red un abrazo y los mejores deseos porque esta semana sean bendecidos en el Señor Jesús.

Llegamos al  IV domingo del tiempo ordinario, la vida va transcurriendo con sus afanes, gozos y esperanzas, y en ella nos acompaña nuestro amigo Jesús de Nazaret, quien nos enseña con autoridad y a quien el mal está sometido.

Ciertamente que a la enseñanza, a la palabra se le debe atención y escucha. Así debe ser nuestro proceder ante las enseñanzas de Jesús, ante su Palabra de Vida, de escucha atenta, reflexiva y activa.

Ya lo dice la primera lectura: “suscitaré un profeta de entre tus hermanos, como tú. Pondré mis palabras en su boca y les dirá lo que yo lo mande. A quien no escuche las palabras que pronuncie en mi nombre, yo le pediré cuentas”. Porque el profeta es por excelencia el hombre de la palabra. En este profeta que Dios suscitará en medio de su pueblo, se ha visto la figura del Mesías, Palabra eterna del Padre.

Es por esto que Marcos nos señala la importancia de las palabras pronunciadas por Cristo, es el Maestro que enseña con autoridad, con verdad, que lleva por tanto a la verdad plena. Pero en muchos momentos de la historia la Palabra ha sido deformada, no bien escuchada, no acatada ni vivida. Pasó con los paisanos de Cristo. El camino para seguir al Maestro Jesús de Nazaret, es lento, necesita silencio para la escucha atenta de su palabra, reflexión de la misma y llevarla a la práctica. La Palabra es vida y debe hacerse vida en la  nuestra.

Hoy escuchamos mucha palabrería, charlatanería de la televisión, nacida del vacío y destinada al vacío, discursos de todo tipo, por todos los medios, estamos aturdidos, y lo aceptamos, nos da miedo el silencio, la reflexión, el encontrarnos con nosotros mismos, con nuestro ser interior, con la confrontación de nuestra propia existencia con la Palabra.

Nos pasa como cuando Jesús visitó la casa de Marta y María: “Aconteció que yendo de camino, entró en una aldea; y una mujer llamada Marta le recibió en su casa. Esta tenía una hermana que se llamaba María, la cual, sentándose a los pies de Jesús, oía su palabra. Pero Marta se preocupaba con muchos quehaceres, y acercándose, dijo: Señor, ¿no te da cuidado que mi hermana me deje servir sola? Dile, pues, que me ayude. Respondiendo Jesús, le dijo: Marta, Marta, afanada y turbada estás con muchas cosas. Pero sólo una cosa es necesaria; y María ha escogido la buena parte, la cual no le será quitada”.

Lo importante es pues estar a los pies del Maestro escuchando su Palabra, es la parte mejor; pero las cosas no se quedan ahí, la Palabra tiene que llevarse a la vida. Palabra, escucha y práctica se entrelazan, porque como dice la escritura la Palabra es viva y eficaz. Asimismo el salmo 94 nos invita a que: “Ojalá escuchéis hoy su voz:”No endurezcáis el corazón como en Meribá, como el día de Masá en el desierto: cuando vuestros padres me pusieron a prueba y me tentaron, aunque habían visto mis obras”. Sí,  es necesario hoy, escuchar la voz del Señor y no endurecer el corazón, sino pedir al Dios de la Vida que lo haga dócil y pronto para cumplir su palabra en todo momento.

La enseñanza-palabra de Jesús es pues vida, sanación, aniquilación- liberación del mal, curación de las heridas más profundas de nuestra condición humana. Es aliento en las dificultades, es esperanza de que otra sociedad se pueda construir.

Todos necesitamos pues, la palabra de Jesús para aniquilar los demonios secretos  que tenemos dentro, como lo dice Él mismo: “lo que sale de dentro es lo que hace impuro al hombre. Porque de dentro, del corazón del hombre, salen los malos propósitos, las fornicaciones, robos, homicidios, adulterios, codicias, injusticias, fraudes, desenfreno, envidia, difamación, orgullo, frivolidad. Todas esas maldades salen de dentro y hacen al hombre impuro”.

Acojamos la Palabra con autoridad de Jesús y dejemos que nos impregne de su bien, de su seguridad, de su aliento de vida. Pidámosle que nos libere del mal y nos haga de verdad hijos e hijas de Dios.

Reciban mi abrazo fraterno y mi agradecimiento, pues en la colecta para la Infancia Misionera hemos recogido 450 €. Dios los bendiga por su generosidad. El martes próximo tendremos la reunión de nuestro grupo de Cáritas parroquial, podremos ver las fotografías de los niños y niñas de Mochadó (comunidad negra del río Docampadó, en el Chocó colombiano) en donde las Hermanas de la Compañía del Sagrado Corazón, apoyan un comedor escolar, y con nuestros pequeños aportes estamos contribuyendo a una sana y buena  alimentación de estos niños. Cada mes las integrantes del grupo donan 3€ y este importe es enviado a Colombia para ayudar en esta obra. Te invito a sumarte.

Fraterno
P. Nacho

Celebración.

"Ventana abierta"


600 Programas

29 -Enero - 2012.
Del sacerdote dominico Fco. J. Rodríguez Fassio.


Hoy estamos de celebración.
-Comenta y celebra el sacerdote dominico Fco. J. Rodríguez Fassio-Yo me hago eco de su celebración -con su permiso- porque soy una acérrima fan de su antecesor el Padre Amador Menudo y ahora lo soy de él. Suelo redactar sus programas de "Diálogos en la Vida" en mi blog "Seguir la Senda, Ventana abierta", para propagar sus mensajes y observaciones sobre religión y otros valores, que parece, que a veces, en nuestra sociedad vayan desapareciendo.
Espero que todos/as ustedes lo acojan con el mismo cariño que yo se los presento, en su nombre. 
¡Muchas felicidades al Padre Fco J. Rodríguez Fassio y a todos los componentes que hacen posible este hermoso programa! 


Este es nuestro programa número 600 -nos continúa informando-.
Este programa nació como sucesor de uno llamado "Buenas Noches nos dé Dios", que dirigió durante muchos años el Padre Amador Menudo.
Desde el año 2000 se llama así "Diálogos en la Vida", y durante este tiempo hemos ido haciendo - nos explica el Padre Fco. J. Rodríguez Fassio sobre este programa, su programa, en "Canal Sur 2 Andalucía"- un camino que ha tenido distintas etapas, y ha abierto distintas ventanas, por ejemplo; hoy tenemos ya nuestro blog, se puede ver en "Misiones a la Carta", en el Canal Internacional, e incluso desde principios de año existe una versión substitulada para sordos, en el teletexto en el número 888.
Nuestro mundo, nuestra sociedad, nosotros mismos hemos cambiado mucho desde el año 2000. Sin embargo, a través de todo este tiempo, el programa ha querido ser fiel a su título y a su intuición primera: "Diálogos en la Vida".
Queríamos, y así lo hemos intentado humildemente-prosigue Rodríguez Fassio- situarnos en lo que nos une a todos, en la vida: con sus problemas, sus dificultades, sus alegrías, sus expectativas, sus esperanzas... No hay lugar de encuentro más amplio, donde cada uno está en su casa, que es la vida que tenemos que vivir, que es la vida que vivimos cada día, las circunstancias que vivimos cada día. Y ahí, en esa vida,  que nos une por encima de diferencias ideológicas, o de creencias, o de religiones, o de opiniones, o de caracteres, o de cualquier otro tipo de separación, ahí precisamente ponernos a dialogar.

Dialogar es tender puentes, salir de uno mismo expresando lo que es y lo que tiene, para ponerse en contacto, abierto, receptivo, con aquel que también viene a nosotros con la misma actitud y el mismo vagaje.
Nosotros, como creyentes cristianos,, hemos intentado ofrecer la alternativa cristiana, desde nuestra sinceridad, aunque también desde nuestra incoherencia personal y comunitaria.
Pero también hemos querido -afirma Rodríguez Fassio- estar a la escucha, en diálogo: con las experiencias, las creencias, las opiniones, los sentimientos, las circunstancias, de aquellos que en un primer momento podríamos considerar diferentes a nosotros, incluso opuestos a nosotros, y esto no por estrategia, sino por convencimiento.
* En primer lugar, porque ¿cómo eliminar al otro, cómo prescindir del otro, si somos nosotros, ellos y nosotros los que formamos parte de la vida? No se puede andar en la vida con exclusiones, ni físicas ni mentales.
* En segundo lugar también, para aprender; solamente aquel que está en la vida como discípulo, puede ser una buena persona y un buen creyente.
Hay un viejo texto  de San Alberto Magno, maestro de Santo Tomás de Aquino, que decía:
"Toda verdad, diga quien la diga, viene del Espíritu Santo".

¿Cómo podemos, como creyentes cristianos, permitidnos el lujo de dilapidar cualquier migaja, o trozo, o gran verdad que nos venga por caminos, al parecer insospechados, bajo formas de expresión, al parecer inadecuadas según nuestros oídos o nuestra mentalidad?
¿Cómo no abrir el corazón y la vida a lo que tenemos que aprender unos de otros, para caminar juntos?
Y todo esto lo hemos intentado hacer, sin malos modos, sin malos tonos; tampoco por estrategia, sino por convencimiento:
A golpes no se puede convencer.
 A patadas no se puede caminar juntos por el camino.
 A gritos no podemos entendernos.

Es la hora de los agradecimientos también:
* Agradecimiento a los Obispos del Sur y a canal Sur televisión, que son los últimos responsables de este programa.
* Agradecimiento a todos los grandes profesionales que han estado aportando su buena labor durante estos años: realizadores, productores, cámaras, maquilladores, montadores...
* Agradecimiento a ustedes, que están ahí, que nos han hecho llegar, muchas veces, por muchos conductos sus reacciones, positivas o negativas, pero siempre interesadas e interesantes.
* Y por último, cómo no dar gracias a Dios, el de todos y el de todo, que nos permite estar aquí y comunicarnos.



sábado, 28 de enero de 2012

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO

"Ventana abierta"

ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
28 - Enero 2012.
 


¡Espíritu Santo! Amor eterno del Padre y del Hijo, te adoro, te doy gracias, te amo y te pido perdón por todas las veces que te he constristado en mí y en mi prójimo.
Desciende con abundancia de gracias en las sagradas ordenaciones de los obispos y sacerdotes; en las consagraciones de los religiosos y religiosas; en las confirmaciones de todos los fieles: sé luz, santidad y celo.
A ti, Santo Espíritu de verdad, consagro mi mente, mi fantasía, mi memoria; ilumíname. Haz que conozca a Jesucristo, nuestro Maestro, y comprenda su Evangelio y la doctrina de la santa Iglesia. Aumenta en mí el don de sabiduría, de ciencia, de inteligencia y de consejo.
A ti, Espíritu santificador, consagro mi voluntad: guíame para hacer lo que te agrada; dame fuerzas para cumplir con los mandamientos y con mis deberes. Concédeme el don de fortaleza y el santo temor de Dios.
A ti, Espíritu vivificador, consagro mi corazón: protege y aumenta en mí la gracia divina. Concédeme el don de la piedad. Amén.
 

Beato Santiago Alberione



miércoles, 25 de enero de 2012

El Cielo.

"Ventana abierta"


Las Puertas del Cielo


Un guerrero, un samurai, fue a ver al Maestro Zen Hakuin y le preguntó:
 "¿Existe el infierno?
¿Existe el cielo?
¿Dónde están las puertas que llevan a ellos ?
¿Por dónde puedo entrar?
Era un guerrero sencillo. Los guerreros siempre son sencillos, sin astucia en sus mentes, sin matemáticas. Sólo conocen dos cosas: La vida y la muerte. Él no había venido a aprender ninguna doctrina; sólo quería saber dónde estaban las puertas, para poder evitar el infierno y entrar en el cielo.
Hauikin le respondió de una manera que sólo un guerrero podía haber entendido.
- "¿Quién eres?", le preguntó Hakuin.
- "Soy un samurai, le respondió el guerrero, hasta el emperador me respeta".
Hakuin se rió y contestó:
- "¿Un Samurai, tú? Pareces un mendigo".
El orgullo del samurai se sintió herido y olvidó para qué había venido. Sacó su espada y ya estaba a punto de matar a Hakuin cuando éste dijo:
- "Esta es la puerta del infierno. Esta espada, esta ira, este ego, te abren la puerta".
Esto es lo que un guerrero puede comprender. Inmediatamente el samurai entendió. Puso de nuevo la espada en su cinto y Hakuin dijo:
- "Aquí se abren las puertas del cielo".
La mente es el cielo, la mente es el infierno y la mente tiene la capacidad de convertirse en cualquiera de ellos. Pero la gente sigue pensando que existen en alguna parte, fuera de ellos mismos...
El cielo y el infierno no están al final de la vida, están aquí y ahora.
A cada momento las puertas se abren... en un segundo se puede ir del cielo al infierno, del infierno al cielo.


Dedicado a mis tres hijas.

"Ventana abierta"


A la tercera de mis hijas, Elísabet.


Hoy al verte tan hermosa
y hecha toda una mujer,
he querido recordar,
cuando dentro de mí
a tus hermanas y a ti os llevé.

Con cuanto amor y ternura
mi vientre acariciaba,
para daros calor de madre
y que os sintiérais amadas.

Hoy ya eres tú, mi niña,
una madre también,
y llevaste en tus entrañas,
la vida de un nuevo ser.

A Dios le pedí en mis plegarias
que te concediera ese don,
de ser madre algún día
como lo fui yo.

Porque ese es
el don más maravilloso
que te pudo conceder,
poder sentir en tus entrañas
la vida de un nuevo ser.

Ojalá Dios me dé salud,
para ese menester,
de ver crecer a vuestros  hijos,
como a ustedes, os vi crecer.

Besitos.


lunes, 23 de enero de 2012

Nacer y morir.

"Ventana abierta"


22 - 1 - 2012
Sacerdote dominico Fco. J. Rodríguez Fassio.

Nacer llorando.


Morir riendo.

Hace tiempo no sé cuando, no sé dónde - nos explica el sacerdote dominico Fco. J. Rodríguez Fassio- leí un proverbio que me causó una honda impresión, decía:
"Cuando nacemos, nosotros lloramos y los demás ríen.
Vive la vida de tal modo, que cuando mueras, los otros lloren y tú rías".

Es verdad que cuando nacemos dejamos el espacio cálido y acogedor del útero materno y nos enfrentamos a nuevos retos en la vida, con nuevas necesidades: tenemos que respirar, tenemos que alimentarnos, necesidades de cariño, de amor, acogida, familia..., y la verdad, nos lo va proporcionando otras personas, y es una situación quizás muy cómoda, porque tenemos lo que necesitamos pero sin necesidad de agradecerlo porque somos muy pequeños, y sin necesidad de responsabilidad.

Después viene el crecimiento. Y el crecimiento en cierto modo es asumir esa tarea del agradecimiento y la tarea de la responsabilidad, no sean tan insensible que no nos extrañe el haber recibido la vida, el haber recibido el cariño y el cuidado de los demás, el poder disfrutar de tantas cosas, entre ello, de nosotros mismos, y tener esa sensibilidad, esa capacidad de dar las gracias.
Y por otra parte también, la responsabilidad de preguntarnos:
 Muy bien, y ahora, ¿qué tengo yo que hacer por los demás?
¿A quién tengo yo que cuidar?
¿Qué vidas dependen de la mía, desde las más cercanas, a mi entorno, a las que están más lejanas?
Porque sí, es verdad, que si nosotros no hubiésemos recibido ese cariño, ese alimento, esa acogida, no estaríamos.
¿Qué otras personas dependen de nosotros de alguna manera?
Por eso, en la vida se va sembrando.
Es cierto que no veremos realmente los frutos, porque los árboles que nosotros plantamos ahora, darán fruto en la generación de nuestros nietos.
Pero lo importante es que si yo no planto hoy ese árbol, ellos no comerán esos frutos.
Y así voy haciendo la vida a la vez que me voy haciendo a mí mismo: agradecimiento, responsabilidad, acogida, donación.

Y llega la hora de la muerte, del partir.
Es una hora triste.
La vida es lo mejor que tenemos.
Siempre es un salto al vacío.
Siempre es lanzarse a lo innoto.
Pero, ¿qué sentimiento nos deja el balance de nuestra propia vida.
Si nos tuviésemos que morir ahora, ¿qué balance tendría nuestra vida?
Es una pregunta que nos tenemos que hacer siempre, porque no podemos saber qué tiempo tenemos por delante, ni podemos dejar asignaturas pendientes, ni tareas -como se decía- para cuando tengamos ocasión; sino en cada momento tendríamos que ir, como nos decían nuestras madres cuando salíamos de casa:
"Hijo mío, tú prepárate de todo, no vaya a ocurrirte lo que Dios no permita".
Tenemos que estar siempre preparados; y entonces, en cada momento tendríamos que poder hacer el balance de nuestra vida.
Lo que he vivido hasta ahora, ¿ha merecido la pena?
¿Cómo saberlo?

Yo creo que por una parte, nos podríamos hacer dos preguntas, en primer lugar:

¿Qué nos gustaría haber dejado, de amor, de cariño, de construcción, de justicia, de paz, de mejorar nuestro mundo, de buen recuerdo, de buen sabor?
Y sabiendo lo que nos gustaría dejar, empezar a dejarlo, empezar a que puedan descubrirse aquí esos frutos, ya desde ahora.

La segunda pregunta sería:
¿Y qué me gustaría llevarme?
A los cristianos se nos ha dicho siempre, que nuestras buenas obras -dice la Biblia- nos acompañarán más allá de la muerte.
pero nuestras buenas obras no son como una especie de canicas, o de cuentas de collar sueltas, o de joyas que se encierran en un joyero, y que después se sacan a la hora de la cuenta para saber que tenemos, pues, nuestro tesorito, nuestra cuenta corriente bien llena; sino que nuestras obras, somos nosotros mismos, viviendo.
¿Qué tipo de personas me he ido haciendo a través de la vida?
¿En qué medida he establecido unas relaciones tan sanas, tan buenas, que no solamente me han hecho mejor, sino que he podido yo hacer mejor a los demás?
¿Qué tal mis relaciones con Dios, mis relaciones con los demás, mis relaciones conmigo mismo, mis relaciones con la naturaleza, con la sociedad?
¿Qué tipo de relaciones? Porque todo nos lo jugamos en las relaciones a fin de cuentas.
Y eso que nos hemos ido siendo, nos hemos ido haciendo, eso realmente es lo que nos podemos llevar, y culminará más allá de la muerte.

Por eso uno puede reir a la hora de la muerte, no porque le gusta morirse, evidentemente, sino porque por una parte, tiene cierta satisfacción legítima por lo que deja y por lo que se lleva, pero sobre todo también -segundo motivo importante- de poder reir en la muerte, porque tenemos la esperanza y la ilusión de lo que vamos a encontrar, o sobre todo a Quién vamos a encontrar.

Si yo como creyente he vivido toda mi vida con la nostalgia de Dios, intentando conocerlo más profundamente, seguirle más coherentemente, buscando su rostro en el rostro de las demás personas, intentando ser testigo de su Luz, de su Verdad, entonces realmente el paso al otro lado será también como la ocasión del Gran Encuentro.

Una de las cosas más tristes, es que dicen los psicólogos, que nos puede ocurrir a las personas, es matar la esperanza, no tener ninguna ilusión por lo que puede venir. Y desde luego, si esto es una enfermedad, incluso sicológica, no deja de ser también una enfermedad de la creencia.

Por eso, sí, como decía aquel proverbio que leí no sé dónde, no sé cuándo:
"Vive de tal manera, que cuando mueras, los demás lloren, porque les dejas un buen sabor de boca, porque les dejas un hueco, porque les dejas un recuerdo estimulante; pero tú rías porque tienes motivo".