seguir la senda

La Búsqueda del cristiano



Materiales:
Biblia y una espada plástica
(o una hecha en casa de cartón)


Tema:
Biblia, memorización.


Grados:
2-5.


Edades:
7-11 años.


Advertencia:
Asegurémonos de que sabemos jugar el juego antes de presentarlo a los niños.
Los niños nos devolverán el reto y sería una vergüenza si no sabemos seguirlo.


Lo que vamos a hacer:
Dividiremos a los niños en grupos.
Escogeremos un grupo que vaya primero.
Ellos dirán el libro de la Biblia por orden.
Si lo dicen bien, le pasan la espada al siguiente equipo.
Le diremos que si le pegan a alguien con la espada, su equipo perderá el juego automáticamente.
El segundo equipo en participar dirá el segundo libro de la Biblia.
Si dicen el libro correcto, le devuelven la espada al primer equipo.
Esto continúa hasta que los niños digan todos los libros de la Biblia, o uno de los equipos se olvide o se equivoque y no pueda decir correctamente el libro que le sigue.
Si un equipo no puede decir un libro, el otro equipo tiene que decirlo para ganar.
Cuando los niños lo hacen bien, tenemos que decirles que deletreen los nombres de los libros.
Si un miembro de su equipo no se acuerda o no sabe, el niño de su mismo equipo lo puede ayudar diciéndolo.
Para empezar pueden usar sus Biblias.


Lo que vamos a decir:
Una vez, hace tres días, había varios niños que pensaban que querían ser caballeros. Les gustaba la idea de poder usar armadura brillante, montar los mejores caballos y estar con las familias reales.
Lo que no sabían es que tendrían que entrenar muchas largas horas para tener lo que se necesita para ser caballeros honorables.
El caballero sabio entrenó y después entrenó más, preparándose para una batalla.
Siendo jóvenes sabios, decidieron agregarle juegos a su entrenamiento.
Estos juegos les ayudarían a mejorar sus talentos y pondrian a prueba esos talentos.


En nuestra búsqueda para ser Cristianos más fuertes nosotros tambien necesitamos mejorar nuestros talentos.
Lo hacemos cuando oramos y leemos la Palabra de Dios, La Biblia.
Asi que, ¿cristianos jóvenes, estáis listos para mejorar vuestros talentos?
¡Sí, sí, que comience el juego!