ventana

ventana

Sean bienvenidos

Sean bienvenidos

Invitación y bienvenida

Hola amig@s, bienvenid@s a este lugar, "Seguir la Senda.Ventana abierta", un blog que da comienzo e inicia su andadura el 6 de Diciembre de 2010, y con el que sólo busco compartir con ustedes algo de mi inventiva, artículos que tengo recogidos desde hace años, y también todo aquello bonito e instructivo que encuentro en Google o que llega a mí desde la red, y sin ánimo de lucro.

Si alguno de ustedes comprueba que es suyo y quiere que diga su procedencia, o por el contrario quiere que sea retirado de inmediato, por favor, comuníquenmelo y lo haré en seguida y sin demora.

Doy las gracias a tod@s mis amig@s blogueros que me visitan desde todas partes del mundo y de los cuales siempre aprendo algo nuevo. ¡¡¡Gracias de todo corazón y Bienvenid@s !!!!

Si lo desean, bajo la cabecera de "Seguir la Senda", se encuentran unos títulos que pulsando o haciendo clic sobre cada uno de ellos pueden acceder directamente a la sección que les interese. De igual manera, haciendo lo mismo en cada una de las imágenes de la línea vertical al lado izquierdo del blog a partir de "Ventana abierta", pasando por todos, hasta "Galería de imágenes", les conduce también al objetivo escogido.

Espero que todos los artículos que publique en mi blog -y también el de ustedes si así lo desean- les sirva de ayuda, y si les apetece comenten qué les parece...

Mi ventana y mi puerta siempre estarán abiertas para tod@s aquell@s que quieran visitarme. Dios les bendiga continuamente y en gran manera.

Aquí les recibo a ustedes como se merecen, alrededor de la mesa y junto a esta agradable meriendita virtual.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.
No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad. Les saluda atentamente: Mª Ángeles Grueso (Angelita)

martes, 9 de febrero de 2021

REFLEXIÓN PARA EL MARTES DE LA QUINTA SEMANA DEL T.O. (1) 9 - FEBRERO - 2021

"ventana abierta"

 

De la mano de María

Héctor L. Márquez (Conferencista católico)

REFLEXIÓN PARA EL MARTES DE LA QUINTA SEMANA DEL T.O. (1)

Por qué no caminan tus discípulos según las tradiciones de los mayores y comen el pan con manos impuras?

La lectura evangélica de hoy (Mc 7,1-13), nos sitúa de lleno nuevamente en la pugna entre Jesús y los escribas y fariseos; la controversia entre “cumplir” la Ley al pie de la letra, relegando el amor y la misericordia a un segundo plano, como proponen los fariseos, y la primacía del amor que predica Jesús.

La lectura comienza diciendo que “se acercó a Jesús un grupo de fariseos con algunos escribas de Jerusalén”. Aquí Marcos quiere enfatizar la diferencia entre Galilea y Jerusalén. Jesús ha desarrollado su misión mayormente en el territorio de Galilea; allí ha calado hondo su anuncio de Reino, allí ha obrado milagros y ganado adeptos. Por el contrario, de Jerusalén siempre ha venido la crítica, la oposición virulenta a su mensaje liberador. Allí vivirá su Pascua (Pasión, muerte y resurrección).

Los fariseos y escribas, con el propósito obvio de desprestigiar o hacer desmerecer la persona de Jesús ante los presentes, critican a Jesús y sus discípulos por no seguir los rituales de purificación previos a sentarse a comer. El mismo Marcos describe el ritual de purificación para sus lectores (recordemos que Marcos escribe su relato evangélico para los paganos de la región itálica que no conocían las costumbres judías; por eso también explica los arameismos con que salpica en ocasiones su relato): “Los fariseos, como los demás judíos, no comen sin lavarse antes las manos, restregando bien, aferrándose a la tradición de sus mayores, y, al volver de la plaza, no comen sin lavarse antes, y se aferran a otras muchas tradiciones, de lavar vasos, jarras y ollas”.

Jesús arremete contra el legalismo de los fariseos: “Bien profetizó Isaías de vosotros, hipócritas, como está escrito: ‘Este pueblo me honra con los labios, pero su corazón está lejos de mí. El culto que me dan está vacío, porque la doctrina que enseñan son preceptos humanos.’ Dejáis a un lado el mandamiento de Dios para aferraros a la tradición de los hombres”. Está claro, los fariseos habían convertido el decálogo en un complejo cuerpo de preceptos (la Mitzvá), compuesto por 613 mandamientos que todo judío venía obligado a cumplir. De ahí que Jesús en un momento diga a los fariseos: “Atan pesadas cargas y las ponen sobre los hombros de los demás, mientras que ellos no quieren moverlas ni siquiera con el dedo” (Mt 23,4). La hipocresía, el legalismo ritual vacío.

Jesús está claro, la tradición está basada en el decálogo. Pero esa tradición, propia del pueblo judío, tiene que ceder ante las exigencias del anuncio de la Buena Nueva del Reino a otros pueblos que no tienen la misma cultura, las mismas tradiciones. No podemos establecer un abismo entre lo “sagrado” y el mundo, pues estamos llamados a vivir y proclamar nuestra fe en este mundo. Y esa fe está fundamentada en el amor y la caridad. La tradición es secundaria y tiene que ceder ante estas.

No puede haber prácticas piadosas que aprisionen las obras de misericordia corporales y espirituales. Pues como escribía San Juan de la Cruz, “en el atardecer de nuestras vidas, seremos juzgados en el amor”.

No hay comentarios: