Buenos días nos dé Dios. "ACERCAMIENTO". Viernes, 5 - Mayo - 2023.

  "Ventana abierta"

ENCUENTRO
Yo - Tú - Nosotros
 P. Horacio Solís Iglesias. S.S.P.

Aquí estoy

He pensado en ti y en aquellos momentos que te apetece compartir. Aquí me tienes.

ACERCAMIENTO

Buenos días amig@

Dialogar es entrar en comunicación. Abrir puertas. Descubrir horizontes. Quitar fronteras. Llevar fraternidad y esperanza. Eliminar soledades. Empezar a amar. Vivir.

En el fondo, dialogar es ser persona. Esto es: Reconocer limitaciones, pobreza, errores. ... y es, desde esta limitación, desde donde se entra en comunión con el otro. Se identifican las personas sin dejar de ser cada una lo que es. El ejemplo por excelencia lo encontramos en la persona de Jesús de Nazaret. Se hizo hombre (identificándose sin dar lugar a confusión alguna) para comunicarse con el hombre (cfr Filp 2, 5-8).

Cristo se nos presenta como el perfecto comunicador. Leemos en Comunión y Progreso, número 11: "Por la 'encarnación' se revistió de la semejanza de aquellos que después iban a recibir su mensaje...".

Este diálogo-comunicación nos lleva  de lleno a poner en marcha otra dimensión importante cual es la del perdón. Saber perdonar es colocarse al lado del otro y caminar juntos. Es reconocer la igualdad y valorarla. Perdonar es entrar en ese mutuo mundo de pobreza y limitaciones humanas y liberarse. Desde esta dimensión liberadora se empieza a amar. Hay unidad. La unión y la comunicación son vida. El mayor deseo de Jesús es "que todos sean uno. Como Tú, Padre estás en mí y yo en Ti" (cfr Jn 17, 21).

 Aquí se halla la raíz de nuestro diálogo, amistad y amor. La vida debe ser un continuo acercarse entre sí todos los hombres. Por eso nunca dejes alejarse al amigo triste, solo y dolorido. Nuestra vida tiene sentido en la interacción. La convivencia es un medio de autoconocimiento. Derrumba fronteras de todo tipo. Conduce a la paz y a amarse de verdad. La persona que se automargina suele hablar a menudo de responsabilidad y del deber. Sin embargo la que ama no ofrece mucho y, en circunstancias, nada. Simplemente ama olvidándose de sí misma.

Un feliz día para todos.