seguir la senda

"Ventana abierta"



Un bramán.

¡Hola, amig@s!

"Un bramán miembro de la más alta casta indú, cierta vez rompió un microscopio con el cual se observaban insectos muertos.

Destruir cualquier tipo de vida era para él obrar contra Dios; por eso no comía carne de ninguna clase. Opinaba que el que exterminaba una vida aniquilaba su propia alma.

Un día un misionero le dijo que tampoco debía beber agua, porque al hacerlo destruía una multitud increíble de seres, todos ellos criaturas vivientes.

Para demostrárselo, le enseñó una gota de agua bajo el microscopio.

El bramán se asustó, pero en lugar de inclinarse ante los nuevos conocimientos, se puso tan furioso contra el instrumento que le mostraba la verdad, que lo rompió.

Así les ocurre a muchas personas con la Palabra de Dios, que le revela verdades que les desagradan y que no quieren conocer.

Con inexorable claridad, la Biblia muestra al ser humano su estado de perdición, su vil corazón,sus malos pensamientos y también sus pecaminosas costumbres, y así intranquilizan sus conciencias que les condena. Por eso odian la Palabra de Dios y quieren aniquilarle.

Dejemos, amig@s, que la Divina Palabra nos convenza acerca de nuestro estado de perdición y aceptemos lo que ella nos dice.

La Biblia no solamente nos muestra lo que nosotros mismos somos, sino también lo que Dios es.

Él es Amor, y por amor a los pecadores perdidos, por amor hacia nosotros, El dio a su Hijo, el Señor Jesús, para que soportara el juicio y la muerte, a fin de que nosotros podamos ser salvos por la fe en Él.