"Ventana abierta"
"Porque yo soy bueno"... Tendemos a pensar que el ser bueno de Dios tendría que ser como nosotros pensamos, , es decir, que se tiene que acomodar a nuestro modo de pensar, , de hacer las cosas, a nuestros criterios... Sin embargo, Dios nos recuerda: "Mis caminos son más altos que los vuestros".
La parábola de hoy habla de desconcierto ante el modo de actuar de Dios, un desconcierto que indigna y llega a provocar protestas. Nos refleja perfectamente a nosotros cuando, por fuera o por dentro, nos indignamos y protestamos contra modos de hacer de Dios que no se acomodan a nuestros presupuestos y planteamientos; cuando pensamos que Dios trata mejor a otros que, a nuestro juicio, tienen menos mérito que nosotros y, por tanto, no merecen el mismo trato. Nos olvidamos entonces de lo que Dios ha hecho por nosotros y tenemos celos de lo que hace por los demás, que no es más de lo que nos ha dado a nosotros. Pero siento que yo merezco más, que Dios no es justo...
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