"Ventana abierta"
HOY EL
RETO DEL AMOR ES DEVOLVER SU TRONO A CRISTO
Hola, buenos días, hoy Israel nos lleva al
Señor. Que pases un feliz día.
OCUPA TU LUGAR, SEÑOR
La fiesta que hoy celebramos me resulta
impresionante: ¡Cristo, Rey del Universo!
Digo que me resulta impresionante porque,
mientras todos en este mundo luchamos, de una manera u otra, por sentirnos
reconocidos, mientras tantos poderosos intentan alcanzar cimas de poder aún más
altas… Cristo, a quien realmente le pertenece este mundo por derecho (porque
todo ha sido creado por Él y todo es suyo), no ha querido implantar su reino
con imposición ni dominio. Más bien, al contrario: se abajó, haciéndose hombre
como nosotros, igual en todo menos en el pecado, para morir en una cruz por
nuestro pecado, comprándonos así con su sangre y conquistando el reinado que ya
le pertenecía.
Él mismo dijo, respondiendo a Pilato: “Mi reino
no es de este mundo”. Pero, sin embargo, nosotros sí podemos hacer que se vaya
implantando su reinado en el mundo. ¿Cómo? Haciéndole Rey de cada una de
nuestras vidas.
Él, más que un rey, parece un novio que
conquista por el amor. Y así, poco a poco, va conquistando el corazón de cada
persona y, transformándonos desde dentro, comienza a implantar a través de nosotros
su reino en medio de este mundo.
Se nota que no necesita ni quiere dominar; lo
que desea es compartir con nosotros su felicidad. Y, para ello, es fundamental
que cada uno reconozca cuál es su lugar. Pues en el corazón de cada persona hay
un trono real que, lógicamente, solo puede ser ocupado por un Rey. Es un trono
que pertenece a Cristo, pero tantas veces lo hemos levantado para sentarnos
nosotros… y todos ya hemos experimentado el desastre que deriva de ocupar
nosotros el lugar de Dios… Hoy es el momento de devolverle su lugar. ¡Que
Cristo reine en mí!
Hoy el reto del amor es devolver su trono a Cristo. Déjate reconquistar por Él, para que puedas descansar y vivir confiado bajo su cuidado.
VIVE DE CRISTO



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