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Sean bienvenidos

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Invitación y bienvenida

Hola amig@s, bienvenid@s a este lugar, "Seguir la Senda.Ventana abierta", un blog que da comienzo e inicia su andadura el 6 de Diciembre de 2010, y con el que sólo busco compartir con ustedes algo de mi inventiva, artículos que tengo recogidos desde hace años, y también todo aquello bonito e instructivo que encuentro en Google o que llega a mí desde la red, y sin ánimo de lucro.

Si alguno de ustedes comprueba que es suyo y quiere que diga su procedencia, o por el contrario quiere que sea retirado de inmediato, por favor, comuníquenmelo y lo haré en seguida y sin demora.

Doy las gracias a tod@s mis amig@s blogueros que me visitan desde todas partes del mundo y de los cuales siempre aprendo algo nuevo. ¡¡¡Gracias de todo corazón y Bienvenid@s !!!!

Si lo desean, bajo la cabecera de "Seguir la Senda", se encuentran unos títulos que pulsando o haciendo clic sobre cada uno de ellos pueden acceder directamente a la sección que les interese. De igual manera, haciendo lo mismo en cada una de las imágenes de la línea vertical al lado izquierdo del blog a partir de "Ventana abierta", pasando por todos, hasta "Galería de imágenes", les conduce también al objetivo escogido.

Espero que todos los artículos que publique en mi blog -y también el de ustedes si así lo desean- les sirva de ayuda, y si les apetece comenten qué les parece...

Mi ventana y mi puerta siempre estarán abiertas para tod@s aquell@s que quieran visitarme. Dios les bendiga continuamente y en gran manera.

Aquí les recibo a ustedes como se merecen, alrededor de la mesa y junto a esta agradable meriendita virtual.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.

No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad.
No hay mejor regalo y premio, que contar con su amistad. Les saluda atentamente: Mª Ángeles Grueso (Angelita)

lunes, 6 de noviembre de 2017

domingo, 5 de noviembre de 2017

Oración de Comunión Espiritual. 5 - Noviembre - 2017

"Ventana abierta"


Oración de Comunión Espiritual


"Guarda mi alma en la paz junto a Ti, Señor".


Es el momento de la Comunión, y ahora cuant@s amig@s siguen este blog y aquellos que pasen y quieran también participar, nos unimos a todos los hermanos del mundo haciendo nuestra Comunión Espiritual.
"Guarda mi alma en la paz junto a Ti, Señor".
"Con las palabras del Salmo, te presento, Señor, mi vida esta mañana con lo que es y con lo que tiene, con todo lo que Tú me has dado, también con mis limitaciones y fatigas, con mis carencias y mis pecados.
Sé, Señor, que sólo Tú me das la paz, que sólo de Ti proviene todo bien.
Yo, en cambio, me encierro con frecuencia en mi círculo egoísta y me miro constantemente a mí, olvidándome de que todo lo que he recibido de Ti es para ponerlo a tu servicio y al de mis hermanos.
Ayúdame con tu gracia a evitar la tentación del protagonismo, de la imposición a los demás de aquello que yo, sin embargo, no siempre hago.
Ayúdame a convertirme a Ti y junto a mis hermanos".


viernes, 3 de noviembre de 2017

Carta Pastoral del Arzobispo de Sevilla con motivo de la I Jornada Mundial de los Pobres. 3 - Noviembre - 2017.

"Ventana abierta"


Carta pastoral con motivo de la I Jornada Mundial de los Pobres


Queridos hermanos y hermanas:
El pasado 13 de junio, el papa Francisco hacía público un mensaje titulado "No amemos de palabra sino con obras". Con este documento instituía la "Jornada mundial de los pobres", que celebraremos el domingo 19 de noviembre .
Ya en los primeros compases del documento nos dice el Papa que el amor a los pobres es "un imperativo que ningún cristiano puede ignorar", pues "el amor no admite excusas: el que quiere amar como Jesús amó, ha de hacer suyo su ejemplo; especialmente cuando se trata de los pobres". Añade el papa Francisco que el amor a los pobres no se concreta en las palabras vacías ni en las emociones momentáneas ante una desgracia o  una catástrofe, sino en "una respuesta de amor" a la entrega de Jesús por nosotros que, con la gracia de Cristo, se transforma en misericordia efectiva con nuestros hermanos más necesitados, traducida en obras concretas.
Así lo vivieron las primeras generaciones cristianas, haciendo suyas las enseñanzas de Jesús (cf. Mt 5, 3; Hch 2, 45; St 2, 5- 6, 14-17). Pero no siempre ha sido así. En ocasiones nos hemos olvidado de los pobres, a pesar de que el Espíritu Santo siempre nos ha recordado este mandato capital del Evangelio, a través de quienes, como Francisco de Asís, han dedicado su vida al servicio de los últimos.
El Papa nos precave del peligro de pensar que cumplimos el mandamiento del amor con ayudas esporádicas o con voluntariados puntuales, que tranquilizan nuestra conciencia, pero que no nos llevan a un verdadero encuentro con los pobres y a un compartir que se convierta en un estilo de vida. Esto sólo es posible desde la oración auténtica y desde la conversión continua, que nos estimulan a vivir la caridad y el gozo cuando tocamos con las manos "la carne de Cristo" en sus pobres.
A continuación, el Santo Padre nos dice que si realmente queremos encontrar a Cristo, es necesario que toquemos su cuerpo en el cuerpo llagado de los pobres. Cita el Papa estas palabras de san Juan Crisóstomo: "Si queréis honrar el cuerpo de Cristo, no lo despreciéis cuando está desnudo; no honréis al Cristo eucarístico con ornamentos de seda, mientras que fuera del templo descuidáis a ese otro Cristo que sufre por frío y desnudez". Concluye el Papa: "Estamos llamados, por lo tanto, a tender la mano a los pobres, a encontrarlos, a mirarlos a los ojos, a abrazarlos, para hacerles sentir el calor del amor que rompe el círculo de soledad. Su mano extendida hacia nosotros es también una llamada a salir de nuestras certezas y comodidades".
Habla después el Papa de la virtud de la pobreza, que lleva consigo el desprendimiento de las cosas materiales y la austeridad en el uso y disfrute de los bienes, compartiendo con los pobres no sólo lo que nos sobra, sino incluso aquello que estimamos necesario. Nos llama el Santo Padre a hacer una "opción fundamental" por los pobres, a amar eficazmente a los más necesitados, a escuchar su grito y a comprometernos para sacarlos de su pobreza.
La realidad de la pobreza en nuestro mundo compromete nuestra vida, con frecuencia demasiado cómoda. No nos quedemos paralizados o resignados, como si la pobreza en el mundo fuera un mal fatal contra el que no podemos luchar. Impliquémonos con generosidad sin poner condiciones.
La decisión del Papa de instituir una Jornada Mundial de los Pobres, quiere espolear nuestra conciencia un tanto adormecida y estimular nuestro compromiso. Sugiere el Santo Padre que en la semana previa a esta Jornada se organicen encuentros de solidaridad y ayuda concreta; que como signo de la realeza de Cristo, se invite a los pobres y a los voluntarios a participar conjuntamente en la Eucaristía que celebraremos el domingo siguiente, en el que recordaremos que la iglesia debe ser en el mundo "el reino de la verdad y la vida, el reino de la santidad y la gracia, el reino de la justicia, el amor y la paz".
A todos nos pide Francisco que colaboremos en la institucionalización de esta Jornada, para que se convierta en un fuerte llamamiento a nuestra conciencia creyente, pues los pobres nos permiten entender el Evangelio en su verdad más profunda.  "Los pobres —termina el Papa- no son un problema, sino un recurso al cual acudir para acoger y vivir la esencia del Evangelio".
Quiero recordar algo que a todos nos debe quitar el sueño: Sevilla capital tiene el triste privilegio de poseer tres de los cinco barrios más pobres de España, que son cinco de los quince barrios más pobres de la Unión Europea. A la Vicaría para la Nueva Evangelización, a Caritas Diocesana y a las Delegaciones Diocesanas más directamente concernidas, encomiendo la programación de esta Jornada.
Para todos, y muy especialmente para los pobres y quienes viven más cerca de ellos ayudándoles y sirviéndoles, mi saludo fraterno y mi bendición.
+ Juan José Asenjo Pelegrina
Arzobispo de Sevilla


miércoles, 1 de noviembre de 2017

Ángelus. Los santos son como los vitrales que dejan pasar la luz de Dios. 1 - Noviembre - 2017

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Ángelus
Miércoles, 1 de noviembre de 2017

Los santos son como los vitrales que dejan pasar la luz de Dios



En el día en que la Iglesia celebra la festividad de Todos los Santos, Francisco compartió el rezo del ángelus desde la ventana de su estudio en el palacio apostólico.
Francisco dijo que esta es una fiesta de familia y que las bienaventuranzas "no exigen gestos clamorosos, no son para super hombres, sino para quien vive las pruebas y las fatigas de cada día. Para nosotros."

"Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días y buena fiesta!
La Solemnidad de Todos los Santos es "nuestra" fiesta: no porque nosotros somos buenos, sino porque la santidad de Dios ha tocado nuestra vida.

Los santos no son figuritas perfectas, sino personas atravesadas por Dios. Podemos compararlas con los vitrales de las iglesias, que hacen entrar la luz en diversas tonalidades de color.
Los santos son nuestros hermanos y hermanas que han recibido la luz de Dios en su corazón y la han transmitido al mundo, cada uno según su propia "tonalidad".

Pero todos han sido transparentes, han luchado por quitar las manchas y las oscuridades del pecado, de tal modo de hacer pasar la luz afectuosa de Dios. Este es el objetivo de la vida: hacer pasar la luz de Dios; y también el objetivo de nuestra vida.

De hecho, hoy en el Evangelio Jesús se dirige a los suyos, a todos nosotros, diciéndonos "Felices" (Mt 5,3).
Es la palabra con la cual inicia su predicación, que es "evangelio", buena noticia porque es el camino de la felicidad. Quien está con Jesús es bienaventurado, es feliz.

La felicidad no está en el tener algo o en el convertirse en alguien, no, la felicidad verdadera es estar con el Señor y vivir por amor.

¿Ustedes creen esto? ¿Más o menos, no?

La felicidad verdadera no está en el tener algo o en convertirse en alguien; la felicidad verdadera es estar con el Señor y vivir por amor.

¿Creen en esto? ¡Va un poco mejor! Debemos ir adelante, para creer en esto.

Entonces, los ingredientes para una vida feliz se llaman bienaventuranzas: son bienaventurados los sencillos, los humildes que hacen lugar a Dios, que saben llorar por los demás y por los propios errores, permanecen humildes, lejos de la justicia, son misericordiosos con todos, custodian la pureza del corazón, trabajan siempre por la paz y permanecen en la alegría, no odian e, incluso cuando sufren, responden al mal con el bien.

Estas son las bienaventuranzas. No exigen gestos clamorosos, no son para super hombres, sino para quien vive las pruebas y las fatigas de cada día, para nosotros.
Así son los santos: respiran como todos el aire contaminado del mal que existe en el mundo, pero en el camino no pierden jamás de vista el recorrido de Jesús, aquel indicado en las bienaventuranzas, que son como un mapa de la vida cristiana.
Las bienaventuranzas son el mapa de la vida cristiana.
Hoy es la fiesta de aquellos que han alcanzado la meta indicada en este mapa: no sólo los santos del calendario, sino tantos hermanos y hermanas "de la puerta de al lado", que tal vez hemos encontrado y conocido.
Hoy es una fiesta de familia, de tantas personas sencillas, escondidas que en realidad ayudan a Dios a llevar adelante el mundo. ¡Y existen tantos hoy! Son tantos. Gracias a estos hermanos y hermanas desconocidos que ayudan a Dios a llevar adelante el mundo, que viven entre nosotros, saludémoslos con un fuerte aplauso: ¡todos!

Sobre todo – dice la primera bienaventuranza – son «los pobres de espíritu» (Mt 5,3).

¿Qué cosa significa?

Que no viven para el éxito, el poder y el dinero; saben que quien acumula tesoros para sí no se enriquece ante Dios (Cfr. Lc 12,21).
Creen en cambio que el Señor es el tesoro de la vida, y el amor al prójimo la única verdadera fuente de ganancia.

A veces estamos descontentos por algo que nos falta o preocupados si no somos considerados como quisiéramos; recordémonos que no está aquí nuestra felicidad, sino en el Señor y en el amor: sólo con Él, sólo amando se vive como bienaventurado.

Quisiera finalmente citar otra bienaventuranza, que no se encuentra en el Evangelio, sino al final de la Biblia y habla de la conclusión de la vida: «Felices los que mueren en el Señor» (Ap 14,13).
Mañana seremos llamados a acompañar con la oración a nuestros difuntos, para que gocen por siempre del Señor.
Recordemos con gratitud a nuestros seres queridos y oremos por ellos.


La Madre de Dios, Reina de los Santos y Puerta del Cielo, interceda por nuestro camino de santidad y por nuestros seres queridos que nos han precedido y han partido ya para la Patria celestial.

«A veces me duermo cuando rezo», admite el Papa Francisco en una entrevista con TV2000. Miércoles, 1 - Noviembre - 2017

"Ventana abierta"


«A veces me duermo cuando rezo», admite el Papa Francisco en una entrevista con TV2000



01 noviembre 2017
Papa Francisco



El Papa Francisco experimenta un fenómeno no infrecuente en la vida religiosa: a veces se duerme cuando reza,

Lo explica en una entrevista que se transmite hoy miércoles 1 de noviembre, en TV2000 en Italia, de la que se ha publicado un pequeño adelanto.

“Cuando voy a rezar algunas veces me duermo. Lo hacía también Santa Teresita del Niño Jesús. Ella decía que al Señor, a Dios, al Padre le gusta cuando uno se duerme
 rezando.

El Papa Francisco lo explica en el programa Padre (Padre nuestro) en el que dialoga con el P. Marco Pozza, capellán de la cárcel de Padua, como parte de una iniciativa de la Secretaría para las Comunicaciones de la Santa Sede y TV2000.

Sobre este tema de la oración con confianza recuerda que en el salmo “129, 130, uno pequeño, se dice que se está ante Dios como un niño en brazos de su padre.
Esta es una de las muchas maneras en las que el nombre de Dios es santificado sentirme niño en sus brazos”

Con frecuencia, prosigue el Papa decimos ser cristianos, decimos que tenemos un Padre, pero, vivimos como... no digo como animales, sino como personas que no creen ni en Dios ni en el hombre, sin fe”.

“Vivimos también haciendo el mal, vivimos no en el amor sino en el odio, en las competencias, en las guerras”, prosiguió el Pontífice

El nombre de Dios, cuestionó el Santo Padre, “¿es santificado en los cristianos que luchan entre ellos por el poder? ¿ Es santificado en la vida de aquellos que pagan a un sicario para librarse de un enemigo? ¿Es santificado en la vida de quienes no se encargan de sus propios hijos? No, allí no se santifica el nombre de Dios”.



“Yo también, cuando oro, a veces me quedo dormido”, dijo el Pontífice. (EFE)

Redacción Perú21
31/10/2017 

Sí, él también lo hace. El papa Francisco reconoció que a veces se queda dormido mientras reza, pero agregó que esto no le impide "santificar el nombre de Dios".

"Yo también, cuando oro, a veces me quedo dormido", confesó sonriendo el pontífice en una entrevista que será transmitida el miércoles por la televisión católica italiana TV2000.

Según dice la Biblia y fuentes religiosas, el descanso y el sueño, si se ofrecen a Dios, se convierten en oración.
Y así lo reafirmó el papa al indicar que "Santa Teresa del Niño Jesús también lo decía y sostenía que le agradaba mucho a Dios". El pontífice citó uno de los numerosos salmos en los que se habla del sueño, y se pide al creyente que "se abandone a Dios como un niño en brazos del padre".

El papa agregó que "esa es una de las muchas maneras de santificar el nombre de Dios, sentirse niño en sus brazos".

El papa —de 80 años— suele aparecer lleno de energía cuando encara multitudes, pero su rostro se transforma completamente cuando reza: se vuelve serio y circunspecto o cierra los ojos por largos momentos.

Asimismo, se sabe que la agenda del papa es muy cargada, por lo que se acuesta a las 9 p.m. y se levanta a las 04 a.m. Luego procede a orar y en la tarde suele tomarse una corta siesta después del almuerzo, de acuerdo con fuentes del Vaticano"

Oración de Comunión Espiritual. Solemnidad de Todos los Santos

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Oración de Comunión Espiritual


Solemnidad de Todos los Santos


Estimados amig@s, cuando nos muestra el sacerdote el Cuerpo y la Sangre de Cristo nos sentimos dichosos, bienaventurados de poder alimentarnos con Él.
Nos acercamos a comulgar también nosotros, y aquell@s amig@s que pasen por este blog y lo deseen. 
Hacemos ahora juntos nuestra Comunión Espiritual. Sintamos la dicha del Señor en esta Solemnidad de Todos los Santos.
"Gracias, Señor Jesús, porque proclamándonos dichosos, devolviste la Dignidad, el Reino y la Esperanza a los que el mundo tiene por últimos e infelices, los pobres y los humildes; los que lloran y sufren; los que tienen hambre y sed de fidelidad a Dios; los misericordiosos, que saben perdonar a los demás; los que proceden con un corazón limpio y sincero; los que fomentan la paz y desechan la violencia; los perseguidos por servirte a Ti y al Evangelio.
Tengo hambre de la justicia, que la busque en Ti.
Tengo deseo de paz, que no sólo sea una buena intención.
Que la pobreza sea condición de libertad y no de angustia.
Que mi llanto no me lleve a la desesperación.
Que mi humildad no sea cobardía.
Que sea misericordioso, pero no superficial e indiferente.
Dame los ojos de la fe, para ver, y el corazón puro para amar.
Tú, Señor Jesús, eres el ejemplo que me anima a seguirte hasta el final.
Tú, mi fuerza, Bendito seas por siempre, Señor.
Y gracias, porque en este camino, el camino de la santidad, no me dejas solo, estoy acompañado y alentado por la multitud de todos los Santos, los bienaventurados".