En memoria de nuestro querido P. Jesús Andrade Ortega SJ, en su fallecimiento. Lunes, 11 - Mayo - 2020

"Ventana abierta"

 Hdadlosdolores

Torreblanca (Sevilla)

OBITUARIO. Elevamos una oración por el Eterno Descanso del Rvdo. Sr. D. Jesús Andrade Ortega, quien formaba parte de nuestra Comunidad de Jesuitas. Un hombre entregado en cuerpo y alma a los demás a través de su ministerio. Especialmente destacando su labor de atención a los vecinos más necesitados y su trabajo en la Penitenciaría de Sevilla, donde ejerció como Capellán de la unidad mixta.

En memoria de nuestro querido P. Jesús Andrade Ortega SJ, en su fallecimiento.

Carta coloquial dirigida especialmente a nuestro querido P. Jesús Andrade, recordándolo.

 Querido P. Jesús, como comprenderá ha sido un duro golpe para nosotros cuando en esta mañana del 11 de mayo de 2020, se nos ha comunicado su fallecimiento por medio de nuestro también querido P. Leonardo Molina de la Compañía de Jesús.

Sabe que hemos mantenido una comunicación estrecha y asidua con envíos del Evangelio y demás… que me ofrecía para plasmarlo en mi blog; tanto es así, que a pesar de haber estado ingresado en el hospital, no nos faltaba su comunicación a través de WhatsApp, hasta el domingo mismo, que le felicitábamos por su Santo Patrón San Juan de Ávila, -donde le encargábamos hiciera extensiva esa felicitación a su Cdad. de Jesuitas- un día antes de su despedida, por eso ha sido aún más inesperada esta triste noticia de su partida, dejándonos tan huérfanos y apenados.
 
Es verdad, sabíamos que últimamente se encontraba usted más delicado de salud, pero había salido airoso de tantas y tan graves que se le habían presentado... que pensábamos que ahora esto no le iba a hacer mella, pero por desgracia cuán equivocados estábamos.

El Señor quería llevárselo a usted para Sí, y pensaría que había llegado el momento, que ya había esperado el suficiente tiempo como para tener su reencuentro definitivo con Él.

Ya llegó usted de la mano de María.

Y como se encuentra tan cerquita del Señor, podemos decir que le tenemos como un intercesor más en el Cielo.

Ahora disfruta de esa Vida Nueva que se nos prometió y que no tiene fin, y del abrazo eterno del Padre bueno, de donde ya nada ni nadie podrá jamás separarle.



Nuestras sentidas condolencias a la Cdad. de Torreblanca de los PP. Jesuitas

Muy queridos sacerdotes de la Compañía de Jesús en nuestro barrio, P.P: Marcelino, Francisco, David, y nuestro también querido P. Leonardo, que tantos años estuvo entre nosotros conociéndole en profundidad, y que acude a nosotros cada vez que se le requiere, y si hay algún otro sacerdote más que no tengamos el gusto de conocer, vaya también nuestro respeto.
 Para todos ustedes el sentimiento más sincero y profundo por la pérdida de nuestro querido P. Jesús Andrade Ortega.

Lo sentimos muchísimo. Transmítanles este mensaje de condolencias, a sus familiares, y a toda la Sociedad de la Compañía de Jesús, en el nombre de mi familia, y mío en particular, en nombre de su Hdad. de los Dolores, y de amigos y amigas fieles todos de Torreblanca.

Sólo Dios sabe las razones, nosotros las desconocemos y lloramos su ausencia y la de todos nuestros seres queridos que nos van precediendo y, que un día nos abandonaron para dirigirse velozmente a la meta, a la Casa del Padre.

Pero qué dolor se siente en el corazón, cada vez que se marcha alguien querido.

¡Cuánto cuesta continuar caminando sin las personas que queremos!

¡Qué gran vacío dejan en el corazón; pero al mismo tiempo, qué alegría y qué agradecimiento por la fe en la resurrección que nos hace vivir con tanta esperanza los acontecimientos de muerte.

Nuestro querido P. Jesús, llegó con vela encendida al encuentro de su Salvador, diciéndole:

"Señor, yo he vivido esperándote y los latidos de mi maltrecho corazón eran tus pasos".
Y recibió al Autor de la Vida abriendo su gran corazón de par en par.
La clave está en la Sonrisa de Dios al recibir a sus hijos en su Casa para siempre.

¡La clave es su Sonrisa y Dios siempre sonríe!

Creo recordar haber leído, que, " Los antiguos cristianos expresaban la resurrección, no pintando la figura de Cristo saliendo del sepulcro, pintaban a Cristo tomando de la muñeca a Adán sacándolo del abismo; eso es la Resurrección de Cristo, que Él victoriosamente sale del abismo, llevando tras de sí una multitud de cautivos, es la mejor manera de expresar la resurrección ".

Sabemos por la fe, que esto es verdad, porque lo ha dicho Jesús en el Evangelio... Es Misterio y no lo entendemos, pero la Fe nos ilumina: "Yo estaré con vosotros hasta el fin del mundo".

Nuestro entrañable Padre Jesús, ya se encuentra verdaderamente resucitado.  Ya cumplió con todas las expectativas de Dios aquí en la tierra y Dios quiso llevárselo con Él. 
Y el encuentro final con el Señor llegó "casi como un ladrón".

Viene muy a colación la poesía de Casaldáliga:
"Al final del camino me dirán:
¿has vivido? ¿has amado?
Y yo, sin decir nada
abriré el corazón, lleno de nombres".

Nos consta que esto él lo cumplió con creces.

Allí ya no habrá lágrimas ni enfermedad, él no ve a Dios veladamente, ahora ya contempla cara a cara la belleza del Señor, compartiendo el gozo de la Jerusalén del Cielo. Y Él en su gran misericordia, lo ha acogido con manos benditas de Padre.
Esto resulta ser doloroso para nosotros, pero para él es la felicidad plena, en la que todos, cuando se cumplan nuestros días, querremos ser también partícipes.

No nos apene ver atardecer nuestra vida, tiene el atardecer un sosiego, una luz especial, y Dios está al otro lado amaneciendo.

Se nos invita a ser como la pequeña piedra de la orilla; cuando Dios pase, cuando su mano la recoja y la arroje al Lago de la Vida, la pequeña piedra turbará la superficie del agua con incontables círculos, pero cuando alcance la profundidad se quedará en una gran quietud.

Se nos invita a que nuestro corazón sea como la pequeña piedra, ¡Dios está esperando en el fondo!

Creo profundamente que desde allí él rogará por sus familiares, por todos ustedes, mis queridos P.P, por todos nosotros, y por todo aquel que lo necesite como siempre hizo estando aquí, ya que Dios, estoy segura, le habrá otorgado un lugar privilegiado junto a Él.

He recogido aquí unas palabras de San Agustín, que  a pesar de ser muy conocidas, no dejan por ello de ser hermosas:

Dice San Agustín:

"Una lágrima por el difunto se evapora.

Una flor sobre su tumba se marchita.

Pero una oración por su alma, siempre la recoge Dios".

La Virgen María está presente como Madre de los Dolores, pero también como Madre del Remedio, siempre cercana a ustedes, siempre cercana a todos sus hijos, sobre todo cuando sufren.

Que Ntro. Padre Jesús Cautivo, Ntra. Madre María Stma. de los Dolores y S. Antonio de Padua, les infundan el calor y el amor que necesitan y les vuelvan a llenar nuevamente de su Paz y Alegría.

Ustedes los sacerdotes saben hacer con mil tonalidades un hermoso himno a Dios.

Dios les bendiga a todos grandemente.

Reciban un gran abrazo con el que queremos infundirles ese ánimo necesario. Que nos sientan a todos sus amigos de Torreblanca muy cercanos, y en la medida de lo posible reconfortados, con nuestro cariño, recuerdo y oración.

Sus hermanos en el Señor:

Manuel Hurtado, Angelita Grueso, y familia.