"Ventana abierta"
P. Leonardo Molina García. S.J.
DOMINGO 18 TIEMPO ORDINARIO. CICLO A
Aviso: La Conferencia Episcopal propone
que este domingo se celebre el misterio de la transfiguración del Señor.
Pero José Luis Sicre ha mandado el del
evangelio correspondiente.
Pero como es una buena catequesis, yo os
lo mando
Os mando mis ideas sencillamente.
Hay situaciones muy conflictivas en
nuestra vida. En cada salida desde que nos levantamos vamos encontrando
posibilidades, encuentros constructivos, alegrías, frustraciones, etc
Ante esos retos, nos enfrentamos
a soluciones posibles. Y siempre en nuestra mente cristiana,
aparecen también, situaciones cristianas que tratan de
solventar las complicaciones que se nos presentan..
No es fácil. Al mismo tiempo, nos aparecen
los instintos, las soluciones “de todo el mundo lo hace”, nuestras salidas
ancestrales, familiares, tradicionales, grupales, políticas. En definitiva, más
o menos cercana, la propaganda.
Actúan el pasado, el presente, el futuro,
la familia, nuestras comunidades, etc.
Y en medio, agazapadas, las sentencias de
Jesús que nos animan, nos aguijonean, nos abren caminos…
Acababa Jesús de anunciar la pasión a sus
discípulos. No todo iba a ser camino de rosas para los seguidores de Jesús. Es
más; habría espinas, y muchas, en el camino del seguimiento y la fidelidad. Se
nos echan encima frustraciones, depresiones, agobios. Tentaciones de abandono o
marginación del camino cristiano. No crearse complicaciones ni problemas.
Predicaba un jesuita del siglo XVIII, Antonio de Vieira. “Si aliquando,
cur non modo? Y si nom modo, cur aliquando?
¿Nos suena? O, ¿nos debe sonar?
En el evangelio de hoy nos invita Jesús
a la esperanza. Este es mi Hijo amado, Escuchadle. (Mateo 17,
1-7) Levantaos, no tengáis miedo… lo comprobaréis.
En algunas ocasiones, en la oración, en
nuestra vida, hemos ya comprobado la gloria del Señor resucitado,
vencedor del pecado y de la muerte…
Acuérdate de Jesucristo resucitado de entre los muertos. Él es nuestra salvación, nuestra gloria, para siempre. Si con él vivimos, reinaremos con Él, si con Él morimos, viviremos con Él. Acuérdate…
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