"Ventana abierta"
Los cinco minutos del Espíritu Santo
Mons. Víctor Manuel Fernández
Muchas veces sufrimos por la agresividad que llevamos dentro.
Algunas personas reaccionan mal, con agresiones o ironías; otras se callan, pero se aíslan resentidas. Hay muchas tensiones interiores que nos llevan a sentirnos mal con las demás personas. A veces hay cosas que nos molestan y no sabemos bien por qué; otras veces sentimos rechazo por cosas que no son tan importantes.
Es necesario llevar calma y armonía a ese mundo interior, para que no desgastemos tantas energías inútilmente.
El Espíritu Santo puede sanar nuestro interior para que nos liberemos de muchas tensiones innecesarias, para que renunciemos a la guerra con los demás, para que dejemos de resistirnos ante las cosas que nos irritan y aprendamos a aceptarlas como parte de la vida.
Si dejamos que el Espíritu Santo nos serene en un momento de oración, podemos decirle “no” a la violencia interior y optar sinceramente por la paz del corazón.
Esto no significa que no luchemos o que no discutamos cuando es necesario. Sólo
significa que aprendamos a hacerlo sin perder la calma interior. Con la gracia
del Espíritu Santo podemos lograrlo, porque él es el dulce maestro interior.
Oración inspirada en la reflexión de Los Cinco Minutos del Espíritu Santo del 9 de julio
“Espíritu Santo, hoy me acerco a
Ti con humildad y verdad, reconociendo mis tensiones, mi irritación y esa
violencia silenciosa que a veces llevo dentro.
Te pido que entres en lo más profundo de mi ser y calmes esas aguas turbias
que me impiden vivir en paz.
Enséñame a comprenderme y a comprender a los demás, a no dejarme llevar por
el impulso agresivo, ni por el resentimiento callado.
Dame serenidad para aceptar lo que no puedo cambiar y sabiduría para elegir
siempre la paz del corazón.
Sé mi dulce Maestro interior, y ayúdame a responder con amor en vez de
reaccionar con enojo.
Amén”.
#CincoMinutos #EspírituSanto #VíctorManuelFernández #EditorialClaretianaAmén
No hay comentarios:
Publicar un comentario