¿Me dirás por qué abuelita
son tan blancos tus cabellos?
Hijo, es la nieve que anuncia
de mi vida el triste invierno.
¿Y por qué, abuelita, tu cara
tan llena de arrugas veo?
El pesar fue quien trazó
en mi rostro esos senderos.
¿Y por qué tienes los ojos
teñidos de un tinte negro?
Es porque he llorado mucho,
y apenada el alma tengo.
Abuelita, ¿ por qué murmuras
siempre que te doy un beso?
¡Ah! Es que rezo, hijo mío,
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ResponderEliminarPrimero muchas gracias por recoger esta poesía para que no se pierda, la aprendí cuando tenía 6 años y no se me ha olvidado, pero te falta un par de estrofas:
ResponderEliminar"¿Cuál es la razón abuela
de que así tiemblen tus miembros?
Eso es un viento, hijo mío
que viene de allá del cielo.
¿Y porque tienes abuela
la espalda curvada al suelo?
Para ver mejor la tierra
que ha de blanquear mis huesos."
Un saludo.
Maravillosa poesía,también la aprendí cuando era niña,la encontré en un libro de FTD. Muchas gracias por publicarla La estuve buscando por mucho tiempo.La copiaré de inmediato Muchas gracias.
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