"Ventana abierta"
ÁNGELUS
COMO UNO DE ELLOS
María se presenta como uno de ellos.
Es que María también supo apreciar, y vivir, y vivenciar todas esas cosas pequeñas de los pueblos, de la gente sencilla.
Supo visitar y estar con un pueblo, como mujer de pueblo, en un pueblo de pobres, con la gente precisamente sencilla.
Tus manos aldeanas se llenaron de arrugas, de sudor y de trabajo.
Tu piel se fue volviendo también morena bajo el sol.
Tus ojos conocieron el polvo del camino.
Supiste lo que era acarrear el agua y amasar con tus manos el pan de cada día.
No encendían tu horno los Ángeles del Cielo, sino aquellos sarmientos que llenaban tus manos de arañazos y heridas.
Supiste lo que era acarrear y cargar haces de leña y llegar a la noche con el cuerpo agotado de fregar y lavar.
Tal vez por eso quieras a la gente de pueblo más que a nadie, y por eso la gente de pueblo te comprende mejor que los demás, porque hiciste su vida, porque fuiste uno de ellos, y no una princesa hermosa con las manos de nácar, sino como uno de ellos.
Feliz día para todos.
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