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sábado, 8 de marzo de 2014

Día Internacional de la Mujer

"Ventana abierta"

 

Día Internacional de la Mujer


 Estimadas amigas, ya han suprimido la frase : "Día Internacional de la Mujer trabajadora", porque trabajadora somos todas de una u otra manera, ¿verdad, amigas?

Hoy sábado 8 de marzo se conmemora el Día Internacional de la Mujer. La tradicional fecha celebrada con orgullo actualmente por millones de mujeres se inició en Alemania, Austria, Dinamarca y Suiza (1911).
La Asamblea General ONU nombró el 8 de marzo de 1977 como el Día Internacional por los Derechos de la Mujer y la Paz Internacional. 

Estimados amigos, no olvidéis dedicar unas líneas a la mujer que amáis a la novia o esposa, a una hermana, a una madre. Aquí tenéis, amigos, algunas bellas opciones.

 

 Aquí van unos maravillosos versos que he podido encontrar de algunos de los más insignes poetas sobre nosotras las mujeres.  




EL HOMBRE Y LA MUJER 
Víctor Hugo


El hombre es la más elevada de las criaturas;
La mujer es el más sublime de los ideales.
Dios hizo para el hombre un trono,
Para la mujer un altar.
El trono exalta,
El altar santifica.

El hombre es el cerebro,
La mujer el corazón,
El cerebro fabrica la luz,
El corazón produce el amor.
La luz fecunda, el amor resucita.

El hombre es fuerte por la razón,
La mujer invencible por las lágrimas.
La razón convence,
Las lágrimas conmueven.

El hombre es capaz de todos los heroísmos;
La mujer de todos los martirios.
El heroísmo ennoblece,
El martirio sublima.

El hombre tiene la supremacía,
La mujer la preferencia.
La supremacía significa la fuerza,
La preferencia representa el derecho.

El hombre es un genio,
La mujer es un ángel.
El genio es inconmensurable,
El ángel indefinible.

La aspiración del hombre es la suprema gloria,
La aspiración de la mujer es la virtud extrema.

La gloria hace todo lo grande,
La virtud hace todo lo divino.
El hombre es un código,
La mujer un evangelio.

El código corrige,
El evangelio perfecciona.
El hombre piensa,
La mujer sueña.

Pensar es tener en el cráneo una larva,
Soñar es tener en la frente una aureola.

El hombre es un océano, la mujer es un lago.
El océano tiene la perla que adorna,
El lago la poesía que deslumbra.

El hombre es el águila que vuela,
La mujer es el ruiseñor que canta.
Volar es dominar el espacio,
Cantar es conquistar el alma.

El hombre es un templo,
La mujer es el sagrario.
Ante el templo nos descubrimos,
Ante el sagrario nos arrodillamos.

En fin:

El hombre está colocado donde termina la tierra;
La mujer donde comienza el cielo.

LA REINA
Pablo Neruda


Yo te he nombrado reina.
Hay más altas que tú, más altas.
Hay más puras que tú, más puras.
Hay más bellas que tú, hay más bellas.
Pero tú eres la reina.
Cuando vas por las calles
nadie te reconoce.
Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira
la alfombra de oro rojo
que pisas donde pasas
la alfombra que no existe.
Y cuando asomas
suenan todos los ríos
en mi cuerpo, sacuden
el cielo las campanas,
y un himno llena el mundo.
Sólo tú y yo,
sólo tú y yo, amor mío,
lo escuchamos.

LA RISA
Pablo Neruda


Quítame el pan, si quieres,
quítame el aire, pero
no me quites tu risa.
No me quites la rosa,
la lanza que desgranas,
el agua que de pronto
estalla en tu alegría,
la repentina ola
de plata que te nace.
Mi lucha es dura y vuelvo
con los ojos cansados
a veces de haber visto
la tierra que no cambia,
pero al entrar tu risa
sube al cielo buscándome
y abre para mí todas
las puertas de la vida.
Amor mío, en la hora
más oscura desgrana
tu risa, y si de pronto
ves que mi sangre mancha
las piedras de la calle,
ríe, porque tu risa
será para mis manos
como una espada fresca.
Junto al mar en otoño,
tu risa debe alzar
su cascada de espuma,
y en primavera, amor,
quiero tu risa como
la flor que yo esperaba,
la flor azul, la rosa
de mi patria sonora.
Ríete de la noche,
del día, de la luna,
ríete de las calles
torcidas de la isla,
ríete de este torpe
muchacho que te quiere,
pero cuando yo abro
los ojos y los cierro,
cuando mis pasos van,
cuando vuelven mis pasos,
niégame el pan, el aire,
la luz, la primavera,
pero tu risa nunca
porque me moriría.

  Por todo


  Por las noches blancas al lado del hijo enfermo.
Por el amor y también la pasión.
Porque somos paz pero también mar tempestuoso.
Por los días y noches para terminar el trabajo urgente.
Porque siempre estamos ahí cuando ellos nos necesitan.
Porque somos niñas, trabajadoras, científicas y artistas.
Porque la tierra es mujer y como ella damos vida.


Porque somos hermanas en esta aventura de vivir.
Abracémonos y celebremos, nos lo merecemos. 





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