Páginas

sábado, 14 de mayo de 2011

A Nuestra Madre de los Dolores.

A Nuestra Madre de los Dolores.




En éste tu hermoso día
Madre de los Dolores,
perfuman tu altar
no sólo las flores,
también las plegarias
de los corazones.


Cuantos te invocan
en su aflicción,
alcanzan consuelo
por tu intercesión.


Encuentra el enfermo
en tu devoción,
el bálsamo suave
de su curación.


Consuela a los tristes
en su soledad,
ampara a los niños
en su orfandad.


Madre de los Dolores,
Flor de aroma celestial,
Consuelo de tus fieles
en vida y trance mortal.


Premia a los devotos
su fe y su piedad,
dándoles el Cielo
en la eternidad.


Conserva en la tierra
intacta la fe,
y pide a tu Hijo
que Su Paz nos dé.


Cuando salgo de tu templo
para volver a mi hogar,
siento la pena más honda
mi corazón traspasar,
y un dolor inefable
al tenerte que dejar.


Más sin poderlo prever,
Madre mía,
del barrio me alejé,
pero a mis amigas y amigos
siempre los conservaré.



¡Contigo siempre, María!,
porque jamás podrá suceder,
que yo viva sin tu recuerdo
y que te deje de querer.



Vuestra hermana en el Señor:
Angelita Grueso.

No hay comentarios:

Publicar un comentario